La palabra bayoya tiene tres acepciones: lagarto costero, posiblemente extinto, que tiene la piel oscura con algunas manchas blancas y una especie de cresta sobre el lomo; residuo de la pulpa del coco seco después de rallada y sin leche; bulla, alboroto, desorden o alteración del concierto propio de una cosa. Los hablantes del dialecto puertorriqueño hemos derivado las palabras bayoyar y bayoyero para referirnos a armar el relajo y a la persona dedicada a relajar o a bromear, respectivamente. La palabra en cuestión, definida como alboroto, relajo o guachafita, constituye un indigenismo. (Tesoro lexicográfico del español de Puerto Rico, 2005)
La bayoya en camaguey cuba era una lagartija de colo negro marron, y con al parever escamas, muy fuerte su conitucion, semejante a un cocodrilo.