¿Por qué decir simplemente «mucho» cuando las opciones están por montones? Aquí les comparto algunas palabras o frases que se utilizan en nuestra isla como sinónimo de «abundante».
Choreto
Ese mercado me encantó. Están las frutas choretas, y de lo más lindas.
El vocablo «choreto» es un indigenismo que define la abundancia o la existencia de algo en grandes cantidades, y especialmente se utiliza para referirse a frutos y dinero.
Este significado no se registra en los diccionarios tradicionales, pero sí podemos encontrar que en Venezuela, «choreto» se utiliza, coloquialmente, para referirse a una persona con alguna parte del cuerpo deforme. Asimismo, se emplea para describir una cosa mal hecha.
En Honduras, por otra parte, una choreta es una trompeta o un saldado que se encarga de tocar dicho instrumento musical. En ese mismo país, se utiliza la frase «de choreta» para describir algo que ocurrió de improvisto o por casualidad.
Cundir
Tú no entiendes la cantidad de piojos que tenía esa nena. Tenía esa cabeza cundía.
El Diccionario de la Real Academia Española informa que «cundir» puede utilizarse para describir la propagación o multiplicación de una cosa.
Esto explica por qué en la isla utilizamos el término, especialmente para describir una cabeza llena de los parásitos antes mencionados.
Por un tubo y siete llaves
Aquel parque estaba repleto. Había gente por un tubo y siete llaves.
Este dicho se desprende del español general «por un tubo», solo que en Puerto Rico le añadimos «las siete llaves» para enfatizar la abundancia a la que se hace referencia.
El origen de esta frase está ligado a la cantidad y rapidez con la que el agua se traslada y sale por un tubo.
Cospe
Qué le va a preocupar a ese tipo, si tiene chavos en cospe.
Esta fue la palabra que motivó este escrito, y agradezco a Zoraida Santos por su sugerencia. 😀
Aunque no tan común como las demás frases discutidas, «en cospe» también significa «mucho» o «en abundancia».
Este término también se emplea para describir los pedacitos de madera que saltan cuando se golpea un árbol con el hacha. Son tantos los fragmentos que se dispersan, que de ahí surge utilizar el vocablo para hacer alusión a grandes cantidades de algo.
Pide que hay
Tenemos alcapurrias, bacalaítos, sorullitos, empanadillas, tostones, rellenos… Tú pide, que hay.
Ya en contextos más específicos, se utiliza la frase «pide que hay» para retar a un cliente de forma amistosa, y dejarle saber que puede pedir sin reparos porque hay en abundancia.
En el español general, una frase equivalente sería «pida usted por esa boca».
Según las fuentes consultadas, este dicho nació en la década de los 40, en el Municipio de Caguas, donde había un lugar de comida en el que se pregonaba el ¡Pide, pide que hay! para atraer a más clientes.
Hoy día, suele utilizarse con una connotación sexual, pero también queriendo decir «aquí abunda lo bueno».
Si quiere conocer otras palabras que se utilizan en Puerto Rico para referirse a lo cuantioso o abundante, lea nuestra entrada de la palabra «fracatán«.